viernes, 28 de febrero de 2014

"Formas biográficas. Construcción y mitología individual”, una exposición Kafkiana

Hacía tiempo que no iba al Reina Sofía: la nueva política de tarifas y horario ha complicado las cosas por razones que no explicaré: no interesan a nadie y mucho menos a quienes las han dictado; ellos sabrán lo que persiguen puteando a los clientes potenciales. Como no me creo las polaridades maniqueas, supongo que no ha de ser por puro sadismo, incluso, aunque lo parezca; es más creíble que les moleste ver demasiada gente en las salas, porque la aglomeración rompe la quietud requerida por los juegos metafóricos y las disquisiciones existenciales, relacionales o trascendentes.
Y me encontré con lo de siempre… Espacios con escasa calor humano, grupos de estudiantes que cruzan las salas a velocidad vertiginosa, diletantes que pasean despacio pero sin pausa; montajes que no responden a las expectativas de un público que tiene “sus ideas” —sus expectativas— sobre lo que ha de ser un museo de arte contemporáneo. Hay salas, hay objetos dispuestos por las paredes y en las salas, hay cartelas sumarias en pugna con manifiestos de pretensiones desmesurados, hasta hay vigilantes sentados o paseando... pero al cruzar la cuarta sala, el museo se desvanece en una niebla densa, de puré de guisantes albos... Lo de siempre.

He aquí lo que han escrito para los usuarios de Internet:

La dicotomía entre práctica creativa y vida ha sido uno de los ejes fundamentales sobre el cual se ha articulado la reflexión histórico-artística a lo largo de los siglos.
Desde el referencial texto Las vidas de los más excelentes arquitectos, pintores y escultores italianos (1550-1568) escrito por Giorgio Vasari, la búsqueda de elementos que relacionasen la vida de los creadores con su obra ha constituido uno de los modos hegemónicos de narrar la historia del arte. Esta metodología ha sido cuestionada en la segunda mitad del siglo XX, especialmente con las aportaciones de las teorías estructuralistas llevadas al campo de los estudios sobre arte.
La exposición Formas biográficas. Construcción y mitología individual se centra en la exploración de la identidad como construcción y reconstrucción subjetiva, al modo en que Franz Kafka la entendió cuando escribió: “La escritura se me niega. De ahí mi plan de investigaciones autobiográficas. No biografía, sino búsqueda y descubrimiento de elementos lo más reducidos posible. Ahí es donde me edificaré luego, igual que un hombre cuya casa se tambalea quiere construir una sólida al lado, a ser posible sirviéndose de los materiales de la vieja”. 
La actividad artística como construcción biográfica se despliega a menudo en forma de relato mítico. La mitología individual, cuyo origen se puede encontrar en la crítica literaria del romanticismo, se reactiva dentro del vocabulario artístico en la década de los sesenta. La leyenda biográfica, producida en la construcción de una mitología individual, es una crítica del biografismo: ésta da forma a las crisis de identidad vividas en el individuo en sus distintas relaciones de pertenencia cultural y social. De este modo, la exposición contesta el esquema tradicional de una historia del arte lineal centrada en la superación estilística y la sucesión de vidas de artistas, para trasladar su foco de atención hacia la identidad individual como forma experimental.

El texto de la hoja ofrecida en las cajitas del museo es poco más prolija, pero de semejante guisa y aún más complejo de comprender si somos ajenos al juego cultureta o escépticos con los consabidos “lugares comunes” del postureo post-postmoderno. Lo de siempre.
Me pregunto en qué sentido deberemos entender  las palabras de Kafka y por qué lo emplearán ahora como escudo justificativo, recurrente y tedioso. Las denuncias de Kafka —y aún las de Larra— perviven en estos nichos endogámicos construidos con dinero público para dar testimonio de modernidad o de petulancia, según la voluntad de quien perciba y valore.
En definitiva, otra exposición cajón de sastre —otra más— para apuntalar divagaciones que no interesan más que a quienes los protagonizan… Lo de siempre.

Y puestos a citar a Kafka, ahí va el último párrafo de El Proceso:

"K esperó en su despacho al ordenanza paseando de un lado a otro, rechazó casi en silencio al subdirector, que quiso entrar varias veces para preguntarle por los motivos de su viaje y, cuando al fin tuvo el maletín, se apresuró a llegar hasta el coche. Se encontraba aún en la escalera, cuando arriba apareció el funcionario Kullych con una carta en la mano, con la que aparentemente quería solicitar algo de K. Éste le rechazó con la mano, pero terco y necio como era ese hombre rubio y cabezón, interpretó mal el gesto de K y bajó las escaleras con el papel dando unos saltos en los que ponía en peligro su vida. K se enojó tanto que, cuando Kullych le alcanzó en la escalinata, le arrebató la carta y la rompió. Cuando K se volvió ya en el coche, Kullych, que probablemente aún no había comprendido el error cometido, permanecía estático en el mismo sitio y miraba cómo se alejaba el coche, mientras el portero, a su lado, se quitaba la gorra. Así que K aún era uno de los funcionarios superiores del banco, el portero rectificaría la opinión de quien lo quisiera negar. Y su madre le tendría, incluso, y a pesar de todos sus desmentidos, por el director del banco y, eso, desde hacía años. En su opinión jamás descendería de rango, por más que su reputación sufriese daños. Tal vez era una buena señal que justo antes de salir se hubiera convencido de que aún era un funcionario que incluso tenía conexiones con el tribunal, podía arrebatar una carta y romperla sin disculpa alguna. Pero no pudo hacer lo que más le hubiera gustado, dar dos sopapos en las mejillas pálidas y redondas de Kullych."


Puestos a pasar dos horas en el Reina Sofía o entre Kafka y Rimbaud, lo tengo claro. 

lunes, 24 de febrero de 2014

Arte y derechos laborales

Luis Manuel me pasa referencia del incidente acaecido en Guggenheim Manhattan hace dos días, relacionado con un asunto que está pesando como una losa sobre el prestigio de las instituciones relacionadas con ello: las condiciones en las que están trabajando en Abu Dabi quienes están construyen las sedes "deslocalizadas" de algunas grandes instituciones, entre las que destacan la Fundación S. Guggenheim, y el Museo del Louvre. Según dichas fuentes, los gestores de dichas instituciones han decidido cerrar los ojos para no conocer que en Abu Dhabi los derechos laborales se parecen mucho a los paradigmas que defienden los sectores españoles ultracentristas.

Hyperallergic
Alrededor de 40 personas, relacionadas con el movimiento Occupy Museums, entraron en el museo diseñado por Frank Lloyd Wright, aprovechando la hora de pay-what-you-wish para lanzar consignas, desplegar pancartas y someter a los visitantes a una anómala sesión de trompeta.
Obviamente los "extremistas violentos" son incapaces de entender que los museos y, sobre todo, los de arte contemporáneo, no son lugares donde reinar el Bien, la Verdad y la Belleza; y que no son adecuados para albergar zafiedades: los museos son uno de los pocos recintos de espiritualidad pura que existen y todos los ciudadanos de bien deberíamos impedir que fueran profanados...  Además, la construcción de las nuevas sedes de Abu Dhabi se está acometiendo cumpliendo la legalidad.

domingo, 23 de febrero de 2014

¿Jordi Évole como William Karel?

En el momento de escribir este comentario, la Sexta está emitiendo, en colaboración con varios personajes de gran proyección social, "Operación Palace" como imitación de "Operación Luna" de William Karel. ¡Qué cosas!
Me ha ofendido que haya colocado a José Luis Garci en el lugar de Stanley Kubrick... 

ARCO 2014: éxito absoluto

Con el preámbulo endogámico, surrealista y hortera de la concesión de los Reconocimientos del Arte Contemporáneo, ARCO 2014 ha cerrado sus puertas, como de costumbre, con "éxito absoluto"... al menos eso dicen los portavoces oficiales, como vienen diciendo desde que el certamen madrileño existe. Sin embargo, en esta ocasión y a pesar del "boicot perverso" de los medios internacionales, se diría que la expresión triunfalista se ajusta estrictamente a la Verdad. Sin la presencia de yayoflautas, extremistas o mareas de colores diversos, concentradas en la Puerta del Sol, los muy ilustres príncipes de Asturias, acompañados por el ministro de educación, cultura y Deportes, asimismo, muy ilustre señor Wert, y otras autoridades civiles y estéticas, inauguraron plácidamente el certamen estético que ocupa un puesto relevante en el universo del consumo de lujo...
ARCO parece ser el único lugar donde no son abucheados ni los miembros de la Casa Real ni el ministro Wert. Lo dicho: éxito absoluto; si el arte está de su parte, los magnates pueden estar tranquilos. Y si los magnates están tranquilos, todos seremos felices y comeremos perdices.

Foto de El mundo recortada
La imagen fue publicada por El Mundo y pertenece a "una 'performance' de pole dance protagonizada por una bailarina ataviada con una boina de la Guardia Civil".

Luca Agnani

Lo propone Miguel:

La capilla de San Miguel de Celanova

Introducción

Es la obra más marginal del “ciclo mozárabe” y la que, en apariencia, se encuentra en mejores condiciones de conservación. Y la más pequeña: alrededor de 15 metros cuadrados de espacio libre en el interior (como una habitación media de una casa actual). Si seguimos las indicaciones de Gómez Moreno, nos encontraríamos ante una “iglesia” (en este caso, mejor capilla) de manifiesta influencia cordobesa, que habría sido levantada hacia el año 940, es decir, coincidiendo con los años de mayor esplendor del Califato.
Desde esa perspectiva, los “rasgos mozárabes” son particularmente obvios: tiene arcos de herradura, modillones de rollos con los ornatos de “discos solares” habituales, alfiz y hasta ladrillos colocados “en esquinilla”…
Los documentos conocidos informan de que un tal Froila, casado con Sarracina, "donó en 936 una vila, en territorio de Búbalo, llamada Villare, heredada de sus padres, para que allí estableciese Rudesindo un monasterio, bajo su gobierno con templo de San Salvador y nombre de Cellanova". En este caso los documentos no nos hablan de un monje procedente de Córdoba, pero sí mencionan que los dos personajes citados, San Rosendo y Froila tuvieron  "mucha relación" con la cultura andalusí. Y Gómez Moreno (Iglesias, 1919, p. 240) se apoyaba en la figura de Muzalha, liberta de nombre arabizado que, según su opinión, pudo ser "su aya" o "educadora"... Huelga decir que también pudo tener con ella relaciones más... directas.
De nuevo y aquí muy especialmente, se pone de manifiesto lo inadecuado del término "mozárabe" para evaluar fórmulas arquitectónicas, en este caso, vinculadas no con cristianos sometidos al poder califal, sino con el prelado de un monasterio próximo a Braga (Dumio)...


Dicha relación se manifiesta con claridad en la puerta de acceso, porque sobre ella hay una inscripción latina que menciona expresamente al tal Froila. El texto, difícil de traducir, fue matizado del siguiente modo (Díaz y Díaz, 1990):

“Tú, oh Dios, autor de esta obra eres creído. 
Tu, oh Cristo, borra los pecados a los que aquí oran.
La presente memoria recomienda a Froila, tu indigno siervo,
el cual desea y en el Señor te conjura, oh bien amado que lees esto,
para que hagas memoria de mi, pecador, en la oración sagrada”.

Y es de aceptación general, al menos desde 1002, que Froila fue hermano de San Rosendo, obispo de San Martín de Dumio, y que el propio santo o ambos conjuntamente, fueron los fundadores del monasterio mencionado en los documentos, dentro del cual estaría la miniatura arquitectónica dedicada a San Miguel. Sólo quedaría saber si el texto "Auctor huius operis tu Deus esse crederis" (Tú, oh Dios, autor de esta obra eres creído)  debe entenderse de modo literal...



El análisis. Los elementos supuestamente cordobeses

Según Gómez Moreno (Ars Hispaniae, III, p. 381-382), la obra sería reflejo de la iglesia de Santiago de Peñalba:

“Remedo suyo (de Santiago de Peñalba) en miniatura es la capilla de San Miguel, aneja al monasterio de Celanova y fundada por Froila, hermano de San Rosendo, hacia 940. Su tamaño en longitud es de 7,70 m., abarcando un ábside en herradura por dentro, un cimborrio como bóveda de aristas sobre cuatro arcos, y nave más estrecha con bóveda de cañón. Sus arcos son de herradura; trasdosado y con alfiz el del ábside; los modillones, de rollos adornados, y añade un friso de esquinillas su ábside, como en Mazote. El aparejo es de sillería muy desigual, a hueso, en vez de la mampostería empleada en los demás edificios de este grupo (mozárabe), y aparenta robustecerse con estribos; por dentro, los arcos altos y bóvedas son de ladrillo y conservan su enlucido de cal con líneas rojas, figurando sillería muy regular y un florón en medio del cimborrio, perfilado de negro.” 

Si afrontamos el análisis de la capilla desde un planteamiento escéptico con la idea del “arte mozárabe”, aparecen detalles menos explícitos que en las iglesias con elementos arquitectónicos más ricos. En este caso, la carencia de relieves o capiteles labrados con motivos vegetales hace más difícil argumentar con contundencia frente a quienes sigan creyendo en el “arte mozárabe”.
Para los no creyentes, la “comprensión” de esta obra es sencilla, incluso aceptando la relación que existe entre ella y lo andalusí: basta recordar de dónde vienen las tradiciones culturales cordobesas y que la cultura islámica anterior a mediados del siglo X vivía de repetir fórmulas hispanorromanas.
Los creyentes, por su parte, deberán asumir la complicación de establecer relaciones arquitectónicas directas entre esta zona, escasamente islamizada, y la corte cordobesa, contando incluso con que los documentos describan que fueron relativamente numerosos los objetos cordobeses que llegaron a Galicia, como el ajedrez de la catedral de Ourense.Durante el siglo X los objetos manufacturados en Córdoba viajaron por todos los territorios periféricos al mar Mediterráneo y ello no supuso, que sepamos, importantes influjos arquitectónicos.

La estructura

El edificio surge de la yuxtaposición de tres cuerpos ordenados y escalonados, según fórmula muy frecuente en época romana, especialmente desarrollada en las fases más tardías, en tiempos de difusión masiva del ladrillo. Aquí está documentada la combinación de piedra (muros) y ladrillo (bóvedas), según fórmula documentada en lo califal pero, por supuesto, también en obras de tiempos anteriores.
Entre los elementos más enfatizados a la hora de relacionar la capilla con Córdoba destacan los "modillones" de los que arrancan las arcadas que, a su vez, soportan la bóveda de arista. Sin embargo, esta solución estructural es fórmula documentada en la arquitectura romana.


Villa de Adriano en Tivoli
Los estribos, que parecen dar réplica a la falta de refuerzos laterales, remiten a fórmulas bien documentadas en tiempos asturianos, pero también a las tradiciones previas; en este caso y como indicara Gómez Moreno, no parecen necesarios dada la escala de la edificación. Pero el exceso de materiales y precauciones constructivas no es cualidad exclusiva de estos refuerzos, porque los muros son exageradamente gruesos y los huecos, muy reducidos. Se diría que el edículo —si se me permite emplear este término—, fue concebido para soportar todo tipo de agresiones y, sobre todo, la acción del fuego.
La excepcionalidad del tipo de paramento resulta, cuando menos, desconcertante y sorprende que se haya enfatizado poco. ¿Qué sentido tiene que la iglesia más pequeña ofrezca los  paramentos de ejecución más depurados? Quienes construían muros habitualmente con mampuestos,  ¿por qué reservaron bloques prismáticos para esta "edificación marginal"? También desde esa cualidad es difícil relacionar esta iglesia diminuta (como las de Peñalba y Lebeña) con las de Mazote y Escalada, estructuralmente distintas, pero algo obvio que San Miguel de Celanova definía hito de particular importancia.

La decoración

Por el  interior es simple y sumaria: no existen otros elementos en relieve que una moldura rectangular muy sencilla en el cuerpo del oeste y las del alfiz. ¿La existencia de alfiz garantiza influencia cordobesa? ¿Y si se hubiera empleado el alfiz en la tardoantigüedad, tal y como parece acreditar el testero de San Tirso de Oviedo?



Los arcos de herradura, con despieces de excepcional calidad de labra para una zona "marginal", ofrecen un peralte considerable que, en los dos interiores, tiene un diámetro de rosca exterior sensiblemente igual a la anchura del hueco definido por las jambas. Ello reforzaría la hipótesis según la cual el arco de herradura procedería de los arcos de descarga romanos documentados, al menos, desde los tiempos del Panteón de Roma.
Es difícil situar en el tiempo cuándo se realizó el repinte de falso aparejo regular; la fórmula es frecuente en momentos históricos diversos, tal y como acreditan las miniaturas mozárabes, las Cantigas... pero también la catedral de Chartres, etc.

Si atendemos a la ornamentación exterior, es obvia la relación de esta capilla con Santiago de Peñalba y con Santa María de Lebeña: así lo acreditan los modillones de rollos, pero no olvidemos que la ornamentación de éstos con discos solares, a su vez, nos remite al mismo universo que los arcos de herradura: las tradiciones hispanorromanas documentadas en el noroeste de la Península (lapidas y villas).
Los ladrillos en esquinilla del ábside, contrapuestos a las molduras de piedra sencillas del oeste, definen fórmula habitual en la arquitectura con ladrillo desde tiempos republicanos, que perviven en lo mudéjar... No tiene mucho sentido que en un mismo momento se propusieran soluciones constructivas y arquitectónicas tan distintas como las que reflejan los dos cuerpos bajos de San Miguel de Celanova, para solventar el mismo problema. Lo más razonable es que la cubierta del ábside fuera reparada en un momento posterior y que se recurriera a las posibilidades del ladrillo para ganar vuelo.

Otros elementos

Tal y como anticipaban las líneas anteriores, aún deberíamos volver al texto de la inscripción, que pudo ser realizado muchos años después de la edificación. La expresión “Tú, oh Dios, autor de esta obra eres creído” permite plantear la hipótesis de que la obra no fuera promovida por quien dictó la inscripción, en los tiempos de Frolia. Obviamente, también es factible la interpretación de retórica religiosa reconocida por casi todos los estudiosos, pero aquella sintonizaría bien con lo que sucede con casi todas las “iglesias mozárabes”, indefectiblemente relacionadas con edificaciones o enclaves sagrados de tiempos preislámicos.
Y el último detalle: la existencia de una afloración de granito próxima a la capilla, según algunos estudiosos, abre la posibilidad de que se hubiera dispuesto, precisamente, en un lugar sacralizado desde tiempos remotos. Ello haría más factible que el templo tuviera por objeto "cristianizar" la zona y explicaría el sobredimensionado estructural, para defenderla de quienes se sintieran agraviados por los "nuevos" cultos.


























El modillón anómalo

En el interior no hay ningún elemento animado, como es norma casi de implantación general en el cristianismo hispano entre el concilio de Elvira y la llegada de los musulmanes, pero sí en el exterior. Existe un modillón que rompe la homogeneidad del conjunto, puesto que sigue fórmula antropomorfa, de concepción muy sumaria y estilizada. Dada la escasa altura del edificio y lo sencillo que sería proceder a cualquier “reparación”, lo más probable es que, si no es una broma "reciente" (cuando se retiró el tejadillo que protegía la entrada), se trate de una "superposición" de época incierta, afín a las que se encuentran con cierta frecuencia en Galicia, como conjuros o sortilegios.

Conclusión

Nos encontramos con las circunstancias propias del grupo arquitectónico "mozárabe": relaciones más o menos claras con la arquitectura califal, personalizadas por el arco de herradura, que, como en otras ocasiones, nos hace poner en tela de juicio la ecuación supuestamente obvia que une el arco de herradura al "visigotismo" o, si es posterior al silgo IX, al influjo cordobés. Como el propio Gómez Moreno advirtió —cien años después, aún está más claro—, ese elemento estaba arraigado en el noroeste de la península Ibérica desde mucho antes...
Entiendo que también como advirtió Gómez Moreno, la capilla de Celanova está relacionada directamente con Santiago de Peñalba y con Santa María de Lebeña, pero discrepo con él en la relación con la de Mazote y con la de Escalada.
En definitiva, el edículo de San Miguel de Celanova debería considerarse anterior al siglo X, dentro del ciclo de expansión del cristianismo que, al parecer, se desarrolló en tiempos de San Martín de Braga por la zona de la antigua Diócesis de Astorga y aledaños, mediante pequeños hitos de gran solidez constructiva.
Su excepcional calidad permite intuir que, muy probablemente, estuviera concebido para enfatizar la existencia de reliquias de especial veneración.
Y de nuevo aparece el siglo VI como época de atribución más probable. Durante el siglo X los cristianos de la zona, estrechamente relacionados con el obispo de Dumio, reactivarían la organización del culto, porque es muy probable que en esta parte de la Península no hubiera fractura en las prácticas religiosas. Los cronistas árabes del siglo X juzgaban "politeístas" a "los gallegos" (habitantes de la antigua Gallaecia) porque creían en la Trinidad...

viernes, 21 de febrero de 2014

"Las Furias" en el Museo del Prado

No, no se trata de que quienes se agolpan disciplinadamente junto a la fachada diseñada por Villanueva a la espera de que el reloj marque las 6, la hayan liado parda y se hayan decidido a tomar el Palacio de Invierno y convertir el muy noble museo en la plaza de la Independencia de Kiev. Por fortuna, en asuntos estéticos, las cosas son infinitamente más matizadas y, por supuesto, los amantes del arte, con el peculiar buen tono que les caracteriza, son incompatibles con los excesos... Para mayos abundancia,"Las Furias" alude a una exposición que consagra un error semántico ofreciendo obras de especial escabrosidad, relacionadas con ciertos relatos de la mitología grecolatina. Según la referencia divulgativa del propio Museo:

"Las Furias aparecen como conjunto en la historia del arte en 1548, cuando María de Hungría encargó a Tiziano para su palacio de Binche, a las afueras de Bruselas, cuatro lienzos con los personajes de Ticio, Tántalo, Sísifo e Ixión identificados como los príncipes alemanes que se habían alzado contra su hermano, el emperador Carlos V, y a quienes había derrotado un año antes en Mülhberg.
En España se conoció como Furias a cuatro moradores del Hades greco-latino, al que habían sido condenados por haber desafiado a los dioses: Ticio, cuyo hígado devoraba un buitre por intentar violar a una amante de Zeus; Tántalo, castigado a procurarse en vano alimento por servir a su hijo de festín a los dioses; Sísifo, condenado a portar una enorme piedra por haber delatado las infidelidades de Zeus; e Ixión, castigado a dar vueltas sin fin en una rueda por querer seducir a Hera. El título Furias es en realidad fruto de una confusión. En puridad, las Furias eran unos personajes femeninos, personificación del castigo y la venganza, encargados de velar porque los condenados en el Hades cumplieran sus castigos, pero en España, desde el siglo XVI, se conoció con este nombre a los lienzos que Tiziano dedicó a Ticio, Ixión, Tántalo y Sísifo, utilizándose desde entonces el termino Furias para designar esta temática.
(...)
Las Furias ofrecen múltiples lecturas. En primer lugar, son un instrumento idóneo para profundizar en la recepción de la Antigüedad en el Renacimiento y el Barroco, así como en el intercambio de artistas, obras e ideas entre distintas partes de Europa (...) Las Furias plantean además dos nociones teóricas de gran relevancia; de un lado, la sucesión de obras obviamente relacionadas unas con otras invita a pensar sobre los conceptos de imitación, emulación y originalidad; del otro, se impone reflexionar por qué ciertas formas adquieren un significado que se transmite de generación en generación. La vigencia de estas pathosformeln viene simbolizada en la exposición por el Laoconte, en su doble condición de exemplum artis y exemplum doloris tras su exhumación en Roma en 1506"

Ribera, Ixión

Confieso que la lectura del tríptico ofrecido al visitante que no puede comprar el catálogo, me ha hecho sonreír, como lo han conseguido otros muchos de este mismo museo. Porque, como de costumbre, en ellos parece primar la voluntad de ofrecer comentarios que no quebranten el "buen tono" general que parece ser objetivo prioritario en la gestión del museo. Aunque confieso que al entrar a la exposición hervía en mi memoria aquel incidente "divertido" que supuso la colocación "girada" (90º) de una pintura de Ribera perteneciente a la serie de "Las Furias" y que pone de manifiesto las servidumbres compositivas impuestas por la anisotropía perceptiva. Frente a lo que creen los más recalcitrantes en asuntos estéticos, no sólo las pinturas "abstractas" se prestan a equívocos.
Las Furias... ¿son un instrumento idóneo para profundizar en la recepción de la Antigüedad en el Renacimiento y el Barroco? Acaso hubiera sido mejor hablar de "utilización"... ¿Por qué ciertas formas adquieren un significado que se transmite de generación en generación? Buena pregunta para enmendar la plana a Erwin Panofsky o para sugerir la lectura de sus obras. En este caso concreto, se podrían plantear muchas cosas, pero sobre todas ellas y en lo más elemental, la naturaleza del fenómeno cultural, que implica el mantenimiento de las "creencias" o "ideas" integradas en él mediante los sistemas o subsistemas propios: las tradiciones verbales, los relatos literarios, los tratados morales, los memoriales políticos, las fórmulas educativas y formativas en los distintos áreas de conocimiento, etc., etc. En este caso concreto, hablamos de momentos que, en sus expresiones estéticas, estuvieron muy condicionados por la recuperación "aparente" de la literatura grecolatina. Habría mucho que matizar sobre ello...
Según recoge el texto citado, la recuperación de las historias de Ticio, Tántalo, Sísifo e Ixión, estuvo condicionada por una "razón política" muy poco sutil: María de Hungría pretendía explicar lo que les ocurriría a quienes rompieran el "orden natural". Lo mismo sucedió con otras tradiciones mitológicas rescatadas como "fábulas morales" a beneficio de la estabilidad del Absolutismo: Apolo y Marsias, Laoconte y sus hijos, el Minotauro, el banquete de Tereo, etc., etc. Indefectiblemente, son castigados quienes tienen el atrevimiento de discutir el poder de los dioses. Algo parecido a lo que probablemente dijo un siglo después Felipe IV —que acaso se sintiera la reencarnación de Júpier— a sus "allegados" por manos de Diego de Silva y Velázquez, mediante fórmulas más sutiles en pinturas como Mercurio y Argos y La fábula de Aracne: "Ahí tenéis lo que les sucede a quienes contradicen la voluntad de quien, por derecho de sangre, está sobre los demás". Otro tanto sucedió en casi todas las cortes europeas de la misma época.
Y seguramente, por ese camino encontraremos las "razones" que justifican el éxito relativo de "historias" que a lo largo del siglo XVII se suavizaron en "lo visual", aunque no en el fondo retórico. En todo caso, sorprende advertir que se pudieron pintar obras tan escabrosas para decorar salones decorados con "gusto exquisito", por muy ejemplarizantes que fueran y por mucha calidad pictórica que ofrecieran las manos de Tiziano, Rubens o Ribera.

Tiziano, Ticio
Seguramente, también en aquellos años lo morboso tenía la capacidad de fascinación que aún hoy día se manifiesta ante las imágenes sangrientas de cualquier situación particularmente dolorosa. Hoy, sin ir más lejos, los canales de televisión de casi todo el mundo no se cansan de "informar" sobre los sucesos de la plaza de la Independencia de Kiev, mediante imágenes de cadáveres o de personas alcanzadas por francotiradores. Me falta saber por qué razón lo hacen; no quiero creer que lo hagan simple y llanamente para asegurarse cuotas de audiencia aprovechando la "tendencia natural", que muchos parecemos conservar desde tiempos primigenios, a "disfrutar" contemplando la desgracia ajena.
Asimismo, estoy seguro de que el Museo del Prado no está en el mismo argado; estoy seguro de que sus gestores no tiene voluntad de incrementar la "audiencia", mediante imágenes morbosas: en ellas todos debemos apreciar la maestría de los pintores para reflexionar sobre la imitación, la emulación y la originalidad, mediante la representación de desnudos violentamente escorzados y dotados de expresividad desquiciada. Lo que todo el mundo conoce como pathosformeln.

jueves, 20 de febrero de 2014

Calatrava en pleitos

Según informa Expansión, el juez deniega cerrar la web calatravatelaclava:

El juez deniega el cierre cautelar de la web creada por Esquerra Unida que había solicitado el arquitecto por considerar que daña su imagen, aunque la demanda contra el partido valenciano continúa. El Juzgado de Primera Instancia 12 ha rechazado la petición de Santiago Calatrava para que la web www.calatravatelaclava.com, creada por el partido Esquerra Unida (EU), fuera cerrada cautelarmente al considerar que daña su imagen y le causa un perjuicio económico. Calatrava ha presentado una demanda contra EU en la que reclama 600.000 euros por daños a su honor y culpa a esta web de la cancelación de un contrato con el gobierno brasileño. El juez ha desestimado el cierre cautelar al considerar que han pasado casi dos años desde que se puso en marcha la web hasta que se presentó la demanda, por lo que considera que el propio demandante hasta ahora no ha considerado que hubiera un peligro en la demora y una urgencia suficiente para cancelarla. La demanda seguirá su curso y su procedimiento, ya que el juez no ha entrado al fondo del asunto. EU alega que la web se limita a incluir informaciones contrastadas y enlaces a lo publicado en distintos medios de comunicación.

"Pleitos tengas y los ganes".


Me pregunto si, acosados por la penuria y por la corrupción, no asistiremos al final de una época de la arquitectura española dominada por el desprecio de los procedimientos constructivos y por una funcionalidad escasamente depurada, por decirlo de modo suave. No quiero decir que vea relación —directa— causa efecto entre la arquitectura de ciertos santones del diseño y la corrupción, pero el exceso de grandilocuencia y la escasa racionalidad en usos y procesos me parecen indicios fecundos en ese sentido. 

martes, 18 de febrero de 2014

Tragedia en Miami

Según recoge BBC Mundo, Máximo Caminero, artista norteamericano de origen dominicano, fue detenido por destrozar un jarrón valorado en un millón de dólares de Ai Weiwei.

"Lo hice por todos los artistas locales en Miami que nunca han sido mostrados en museos acá", dijo Caminero, y añadió: "Ellos han gastado tantos millones en artistas internacionales".

Y añadido que lo había hecho siguiendo el ejemplo del propio Ai Weiwei.
La obra formaba parte de un montaje realizado con cerámicas de la dinastía Han (siglo II a. C a s. III d C) repintadas y dispuestas sobre una mesa colocada delante de unas fotografías en blanco y negro que registran cómo el propio Ai Weiwei deja caer una vasija del mismo tipo.
Según cuentan, el artista y disidente chino se manifestó profundamente irritado:

"Las piezas con las que yo trabajo no pertenecen a un museo ni son propiedad de otra persona. Nunca traté de destruir una pieza de museo; las vasijas que destruyo me pertenecen. Él puede arrojar al piso cualquier cosa que quiera arrojar, pero no el trabajo de otra gente".



¡Si quieres romper algo, que sea tuyo!

El fiasco de los Reconocimientos del Arte Contemporáneo 2013 culmina en la dimisión de su organizador

Así lo explicaba elconfidencial:

"(...) Cereceda el sábado argumentó el fracaso debido a la sexualidad de la presentadora, Topacio Fresh, un transexual que ha “incomodado a la sociedad hipócrita, pacata y mojigata en la que vivimos”. El historiador del arte se quejaba de que la crítica contra la banalidad y el espectáculo se escondía una represión “homófoba”. “Topacio es, sin embargo, una verdadera mujer. Así está oficialmente registrada en el registro civil español. Pero los valores que ella encarna resultan conflictivos y problemáticos, tanto para los hombres como para las mujeres”, continuaba.  
El vicepresidente del IAC, Daniel Castillejo, director del ARTIUM, reconocía que la junta directiva de la asociación había tomado la decisión de corregir la situación con rapidez. La decepción fue tan grande tras la gala que algunos socios dudaban de seguir vinculados al grupo. “Fue bastante demencial, me quedé espeluznado”, reconoce Castillejo a este periódico."

Para completar el panorama, Rocío de la Villa en el blog arteyculturavisual,  ha publicado una crónica-justificación, que enfatiza lo más brillante del certamen y coloca sobre las exclusivas espaldas de Miguel Cereceda los méritos del fracaso:

"La comunidad artística ha salido reforzada de la primera edición de los premios Reconocimientos del Arte Contemporáneo, celebrados ayer 14 de febrero en el Museo Reina Sofía de Madrid. Antes de “la gala” se mascaba la tensión en el aire. No solo porque se tratara de la primera vez. Justo el día anterior saltaba desde elconfidencial.es a las redes sociales un artículo donde se ridiculizaba la ingenuidad en las ambiciones de Miguel Cereceda, presidente del Instituto de Arte Contemporáneo y motor de la organización del evento, al tiempo que se vertían las declaraciones de Valentín Roma, que había rechazado el premio al mejor proyecto curatorial de 2013 por no estar de acuerdo con el formato de “la gala”: “No somos espectáculo, ni industria cultural”, vino a decir.
Sin embargo, para demostrar que, a pesar de estar de acuerdo con Roma, la comunidad del arte contemporáneo sí necesita sentirse unida y defender y afirmar el espacio irrenunciable de la creación, la reflexión y la crítica y de la cultura en general en España, el Auditorio 400 se llenó hasta los topes con representantes de todas las especializaciones profesionales procedentes de toda la geografía española, que soportamos con estoicismo todo lo que le sobraba a “la gala” organizada por Cereceda, desoyendo los consejos de su Junta Directiva y prácticamente apartando y ocultando información hasta el último momento a las otras dos organizaciones que se habían sumado a estos Reconocimientos: MAV Mujeres en las Artes Visuales -ya con tres ediciones de premios propios a sus espaldas- y la nueva asociación de coleccionistas 9915. Como reconoció después, ya en la copa, el propio Cereceda: “para el año que viene, nada de tonterías”."

¿La comunidad del arte contemporáneo necesita sentirse unida y defender y afirmar el espacio irrenunciable de la creación, la reflexión y la crítica y de la cultura en general en España? ¡Endogamia y cierra España!

En todo caso, si el objetivo del acto era la "visualización del mundo del arte contemporáneo", no han podido salir las cosas peor, puesto que, de momento y con la excepción de elconfidencial, los medios no se han hecho eco ni de un espectáculo que, según cuentan, podría haber proporcionado demasiados argumentos jocosos a los sectores reaccionarios. A lo mejor se trataba de eso...

lunes, 17 de febrero de 2014

CuestionArte

Una iniciativa interesante:

"Oxfam Intermón, en colaboración con Blanca Soto Arte, organiza la exposición CuestionARTE en la Sala Mercadal de la sede del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (C/ Hortaleza, 63. Madrid), con motivo de la celebración de JustMad5.
Se podrán ver  las obras de los artistas que participarán en el proyecto: Manuel Barbero, PSJM, Chus García Fraile, J.E. Marchesi, Ruth Quirce, Paula Anta y Avelino Sala. Podrán verse también obras del Colectivo Boa Mistura, y parte de los trabajos de los autores del cómic Sonia Pulido, Álvaro Ortiz, Cristina Durán y Miguel Á. Giner (laGRUA)."





¿Pagar por sentarse en un parque?

Miguel propone este vídeo:



Sería la solución "ideal" para resolver el problema de la Puerta del Sol: colocar bancos, que lancen descargas a los usuarios cuando finalice el período de pago. Y podrían hacer algo parecido en el suelo para "resolver" el "problema" de las manifestaciones.

Música del culo

Cristina me pasa la referencia ofrecida por la prensa a la iniciativa de una universitaria norteamericana de Oklahoma, que ha "traducido" a partitura musical moderna la "melodía" dibujda por El Bosco sobre el culo de uno de los condenados en el Jardín de las delicias; y lo ha incluido en youtube. Tal y como recoge Jaume Pi, lo más divertido es que ya existe una espectacular versión coral... "Hay gente pa tó".





domingo, 16 de febrero de 2014

John Stanmeyer

El jurado del World Press Photo ha elegido como foto del año la imagen que John Stanmeyer tomó en la frontera de Yibuti con Somalia, que sugiere tantas cosas en estos días de drama e hipocresía.


Chirigota, 2014


Sobre la antigua Mezquita Mayor de Córdoba


Hace unos días, Paula me pasaba un enlace a la petición de Ana Vera dirigida a la Diócesis de Córdoba. Hoy encuentro en El País un referencia a la misma intención, pero ahora firmada por la Plataforma Mezquita y dirigida a la Junta de Andalucía... Como ya me había manifestado en dos ocasiones sobre la situación bochornosa de la antigua Mezquita Mayor de Córdoba (entrada de 2010/05, entrada 2010/09), sólo queda hacerme eco de una iniciativa, cuando menos, encomiable. Según aparece en change-org:

"Hace 30 años que la Mezquita-Catedral de Córdoba fue declarada Patrimonio Mundial por la Unesco, no solo por su extraordinaria riqueza y complejidad sino especialmente por tratarse de un paradigma universal de concordia entre culturas. 
Ante los continuados intentos de apropiación jurídica, económica y simbólica por el Obispado de Córdoba, incumpliendo gravemente los principios que inspiraron dicho reconocimiento, desde la ciudadanía pedimos la intervención de las administraciones públicas y de la Unesco con el fin de preservar del peligro que corre su declaración como Patrimonio Mundial.

SOLICITAMOS: 

1.- Que deje de emplearse institucionalmente solo el término Catedral para referirse a todo el monumento. 
Mezquita de Córdoba es su designación popular, universalmente conocida y la empleada por la Unesco al declararla Patrimonio Mundial en 1984. La simbólica de Mezquita-Catedral, acordada por unanimidad en pleno municipal como representante de la ciudadanía de Córdoba, define con exactitud su esencia y realidad arquitectónica. 

2.- El reconocimiento jurídico de su titularidad pública. 
La Mezquita-Catedral es propiedad de la ciudadanía, Bien de Interés Cultural, Monumento Nacional y Patrimonio Mundial. Cualquier acto de apropiación privada carece de valor jurídico al tratarse de un bien de dominio público.  

3.- La gestión pública y transparente de la Mezquita-Catedral. 
Su inmensa dimensión cultural, simbólica y patrimonial debe ser administrada por un patronato público con criterios ajustados a su universalidad, garantizando la transparencia en todos los aspectos de su gestión, incluida la económica, y la difusión histórica, artística y arquitectónica con pautas estrictamente científicas.

4.- La redacción de un Código de Buenas Prácticas. 
Por consenso entre las administraciones públicas, académicas, ciudadanas y la Unesco, para evitar acciones que perjudiquen tanto a la imagen y significado del monumento, como a los intereses generales de Córdoba, Andalucía y España, al ser uno de los tres monumentos más visitados del Estado." 

Pues eso.

sábado, 15 de febrero de 2014

Reconocimientos al (o del) Arte Contemporáneo

Vivimos en un país donde llegan las noticias tarde, pero arraigan con furia de provincianismo. Con mucho retraso sobre la emisión de ciertos programas de televisión en Inglaterra y con más de un año de desfase sobre las declaraciones de Chris Dercon (director de la Tate Modern), que comparó su trabajo con el de un gestor de una empresa de radiodifusión pública, parece haber llegado la misma idea a los ambientes españoles (hace poco hubo un precedente muy discutido en Barcelona). Y acaso por ello, el director del MNCARS ha cedido sus instalaciones para la celebración de un evento que, a buen seguro, contribuiría a fomentar su capacidad "relacional".
El pasado jueves, elconfidencial  ofrecía un artículo de Peio H. Riaño que, con matices de la Carver Media Glovar Network,  anunciaba una noticia que sucedería al día siguiente en el MNCA Reina Sofía: la concesión de los "Reconocimientos del Arte Contemporáneo" (sic),  entregados por decisión conjunta de tres instituciones:  el Instituto de Arte Contemporáneo,  la Asociación de Mujeres en las Artes Visuales y la Asociación de Coleccionistas 9915.

"El inventor de los RAC (Reconocimientos al Arte Contemporáneo) (sic) es Miguel Cereceda, presidente del Instituto de Arte Contemporáneo (IAC), que, como indica a este periódico, llevaba esta gala en el ADN de su candidatura a la presidencia de dicha asociación. Así que cuando tomó las riendas de la sociedad, hace un año, se puso en contacto con una productora para que hiciera realidad su sueño. Porque de estos saraos la gente del arte no sabe mucho.
“Mi idea era realizar unos premios del arte contemporáneo para dar mayor visibilidad a los profesionales del sector. Me parece que el modelo mediático de los Goya ha hecho mucho a favor del cine español y buscaba lo mismo”, explica a este periódico. Cereceda tenía una prioridad: “La visibilidad es lo más urgente del arte contemporáneo. Mi obsesión es llegar a la gente y al público, romper con el círculo elitista que se reduce a los suplementos cultuales. Necesitamos que el arte esté en las televisiones”, aunque avisa que esto no será una exposición, sino un “espectáculo”, una “fiesta”.
Salsarosa y performance
En la productora le dijeron, tal y como cuenta el propio Cereceda a El Confidencial, que necesitaban “gente mediática”. “Nos han dicho que ni al director más famoso de España, ni a la galerista más importante les conoce nadie. Así que si queremos estar en la televisión debemos aceptar sus normas. De momento, ya han confirmado su presencia en la gala Televisión Española y Telecino. Y las redes sociales están que arden”, apunta Cereceda.
Por eso contrataron los servicios de Álvaro Forqué (director de cine y realizador de los premios de cine que llevan el nombre de su padre, José María Forqué) para escribir el guion. La gala será presentada por el periodista de Telemadrid Jota Abril –es el presentador de los informativos territoriales-, junto a Topacio Fresh, “galerista y socialité” –reza en el dossier de prensa, aunque ella prefiere definirse como “galerista y vedette”, que hace sus pinitos en el reality de Mario y Alaska. Juntos repartirán los 14 reconocimientos, que no premios.
También habrá actuaciones durante la gala retransmitida: Antonio Chávez, “compositor y productor de última generación tecnológica”; Lumen, “dos linternas y un lienzo lumínico tamaño cine donde son capaces de dibujar cualquier cosa”; Boa Mistura, “los mejores grafiteros del momento”; José Hernández, “considerado actualmente el mejor guitarrista flamenco que conquistará a todos los presentes”. El problema de mezclar es la resaca." (...)

Desde lo que ya hemos comentado en este blog sobre la práctica museística del MNCARS, me parece difícil —por no decir imposible— alterar su carácter endogámico, pero reconozco que la idea de forzar su proyección social me parece buena, aunque el planteamiento apeste a lo mismo que las fiestas de señores píos y señoras pías, para recaudar fondos a "beneficio de los huérfanos, los huérfanos y los pobres de la capital". En todo caso, ignoro la relevancia que habrán otorgado los medios más populares habrán otorgado a la celebración, pero hoy, el mismo medio y la misma persona dan noticia de la crónica de un fracaso anunciado, bajo un título esclarecedor: "La vergüenza ajena toma el Museo Reina Sofía":

"Las previsiones más agoreras vaticinaban tormenta y aquello acabó en ciclogénesis explosiva. Pocas veces el fracaso suma tantos reconocimientos a la salida de un evento, como ocurrió anoche en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, donde se entregaron los Reconocimientos al Arte Contemporáneo (RAC), organizados por la asociación IAC, que preside Miguel Cereceda, el hombre que tuvo el sueño de emular a Los Goya del cine y terminó convirtiéndose en el principal responsable del mayor bochorno jamás vinculado a la imagen del arte contemporáneo español.
Cereceda quiso hacer doblar las campanas en nombre de la visibilidad, quería romper con la barrera de los suplementos culturales –como aseguró en declaraciones a este periódico-, quería entrar en las casas de los telespectadores y enseñar el maravilloso mundo del arte contemporáneo. Afortunadamente, no hubo emisión en directo, porque las campanas terminaron llamando a funeral.
Cereceda confundió el envoltorio con el caramelo; se perdió en el acontecimiento persiguiendo el reconocimiento. Habló en su discurso institucional –en un tono de guerrilla peleona- sobre dignidad y excelencia, sobre valores democráticos y sociales, pidió racionalidad y transparencia a los gestores públicos, reclamó la igualdad de géneros, se revolvió contra la discriminación sexual e instó a defender el patrimonio del arte contemporáneo." (...)

La verdad es que la situación parece pensada para nutrir de contenido a los "pedagogos" de Tele 5 o lo que sería aún más lamentable, para que hicieran ejercicio de vanidad liberal los "periodistas" de Tele Madrid. 
La personalidad de quienes han sido "premiados" es lo de menos, incluso aunque hayan mediado distinciones aparentemente contradictorias con los principios reconocidos por los organizadores. Quienes han votado sabrán por qué lo han hecho... Lo del premio "artista revelación" a Cildo Meirelles (64 años) es de chiste... si no se trata de un error de elconfidencial.

La anécdota me ha recordado un curioso incidente sucedido en la Facultad de Bellas Artes de Madrid hace muchos, muchos años, cuando por iniciativa provocadora de tres jóvenes brillantes, se organizó un alboroto fenomenal porque acudió a inaugurar una exposición Yola Berrocal. ¡Jamás había acudido tanta gente! Naturalmente, nadie acudió con la intención de contemplar las maravillosas obras de los creadores brillantes. Las razones motivadoras eran prosaicas, redondeadas y, por supuesto, sexistas.

¿Realmente desean incrementar la capacidad "relacional" del arte contemporáneo y de las instituciones correspondientes? Es sencillo: bastaría con que quienes lo gestionan y sus allegados dejaran de mirarse el ombligo, al amparo de declaraciones "democráticas", pomposas y manidas, que hacen sonreír a la mayoría. 

Hans Hancker y David Shirley en Trafalgar Square

Por RMG

Hace unos días el Art Newspaper nos comunicaba que tendrá lugar la instalación de dos obras en el Fourth Plinth de Trafalgar Square en 2015 y 2016. Dichas obras pertenecen a David Shrigley con  Really Good  y Hans Haacke con Gift Horse.
En el caso del primero, se trata de una mano con el pulgar hacia arriba. Con una altura de diez metros y un pulgar cómicamente estirado, Shirgley realizará su primera pieza de escultura cívica gigante. En el evento organizado por el ayuntamiento londinense, el artista, comentaba que la intención del monumento era una crítica satírica sobre el poder del arte para cambiar la sociedad en un momento en el que las fortunas económicas estaban patas arriba.
“On the one hand it’s completely ridiculous to suggest that public artwork can aid the economic recovery…but then maybe it isn’t, because if you genuinely believe art is a positive thing, you have to quantify that positive effect”, dijo el artista en su discurso.
Hans Haacke, por su parte, presenta el esqueleto de un caballo en bronce derivado del plan original para el plinto en 1841 (una estatua ecuestre de Guillermo IV). El equino porta en una de sus patas delanteras un teletipo de los precios en la Bolsa de Valores de Londres. A pesar de no asistir a la conferencia de prensa afirmó en un comunicado que su obra iba dirigida en homenaje a dos ingleses del siglo XVIII: por un lado se refería al economista Adam Smith, quien introdujo el concepto de “la mano invisible del mercado” en 1776; y por el otro al pintor George Stubbs, quien publicó su Anatomía de un Caballo el mismo año.


El presidente de la comisión del Cuarto Plinto, Ekow Eshun,  comentó que el caballo del señor Haacke era un “bonito” y “poético” comentario sobre la relación entre el arte, el capital y la sociedad. “It’s a reference to our history but also to the fact that money is the hidden dynamic that fuels pour city for good or bad. It’s… a timely piece in the economic circumstances we live in.” recoge del discurso de Eshun el Financial Times· 
La iniciativa del Cuarto Plinto, la cual se lleva a cabo desde 1998, es financiada por el Ayuntamiento y, a su vez cuenta con el apoyo del Arts Council England, el organismo nacional de financiación.
El alcalde de Londres, Boris Jonson, dijo que cada escultura “resultaba enigmática a su manera”.

Y ahora la pregunta es, ¿una escultura de este tipo puede ayudar a cambiar la dirección de la economía o resolver problemas políticos? Como intentan defender estos artistas, o ¿quizás haga falta ser menos estéticos y más contundentes a la hora de protestar contra un sistema político?
Llama mi atención una parte del discurso generado por Shrigley en el que comenta que “No se trata sólo de una oportunidad para ganar dinero, sino que, lo emocionante es que se te otorga la ocasión de realizar una escultura a una escala que nunca habrías imaginado” ¿Cómo puede ser que un artista como Shrigley se quede en un discurso tan plano? Es cierto que es una gran oportunidad para realizar algo a gran escala, pero quizá, que te expongan una pieza en Trafalgar Square debería ser una ocasión para tocar otros aspectos más importantes que perjudican al arte y a su círculo. Esta frase del artista me recuerda más a un monumento conmemorativo que a una escultura con trasfondo que es lo que intenta defender en otras partes de su discurso.

viernes, 14 de febrero de 2014

La National Gallery de Londres

Por Clada

Fue la tarde del viernes cuando decidí visitar la National Gallery de Londres. Llegué allí sobre las 5, aprovechando el horario ampliado que mantiene el museo abierto hasta las 9 de la noche. Normalmente este solo abre hasta las 6, pero durante el fin de semana puedes encontrar museos que cierran más tarde. Es la iniciativa que aquí han llamado “Friday lates. Start your weekend at the Gallery”, y que además incluye otra serie de actividades como visitas guiadas extra, conferencias, sesiones de dibujo y música en el bar y dentro de las propias salas de exposición. Parece que el museo hace un esfuerzo por hacer más atractiva la experiencia y atraer a un público más amplio, considerando esta también como un momento de ocio y “relax” con el que comenzar el fin de semana.
El museo está ubicado en el centro de la ciudad, en la misma Trafalgar Square, centro de las manifestaciones y hoy abarrotada de turistas. Subo las escaleras hasta llegar al balcón que precede la entrada principal, y encuentro que esta se ha convertido en un mirador desde el que tomar fotografías de postal de la plaza. Pienso que ya me puedo hacer una idea de lo que me voy a encontrar en el interior.


Según entras hay un hall bastante amplio, y aunque haya una gran cantidad de gente no se forman grandes aglomeraciones. Veo en frente la escalera que conduce a las salas de la colección, y a los lados varios puestos de información con los mapas de las plantas y las audioguías, por los que hay que pagar. Algo muy bueno aquí es que casi todos los museos, incluida la National Gallery, son gratis (salvo en el caso de algunas de las exposiciones temporales). No obstante hay que pagar una libra por adquirir el mapa y encuentras a tu paso varias huchas dirigidas a que los visitantes donen lo que consideren. Encuentro que esta gratuidad es un factor muy significativo en la captación de público no especializado y no solo turístico, que permite que sea mucho más accesible. Teniendo en cuenta además que Londres es una ciudad tan cara y fría, creo que la visita a los museos de esta manera puede convertirse en algo habitual para los ciudadanos.
Consulto la programación. Apenas hay información en los mostradores sobre las obras de la colección, pero sí te la dan si la solicitas. También hay un folleto con las diferentes actividades que ofrecen que posteriormente podré ojear. Decido comenzar por ver la exposición temporal que esta vez también es gratuita, “Van Gogh’s Sunflowers”, y me dirijo a la planta inferior del edificio donde me dicen que comienza la cola, no sin antes atravesar curiosamente una de las tiendas del museo. Una vez llego, me entero de que hay que esperar aproximadamente media ahora, y eso que hoy es un día de suerte, pues según me han contado durante las primeras semanas esta rodeaba Trafalgar Square. Aún así me parece que está bien organizada y que no dificulta el paso al resto de los visitantes.


Habiendo otras muchas cosas que merecen la pena verse, acabo buscando directamente el resto de las salas. Pero antes, en esta misma planta junto a la cafetería, descubro unas mesas con ordenadores en los que puedes buscar cualquier obra del museo, leer información más precisa sobre ella y ubicar en qué sala exacta está situada. También te permite planificar tu propio recorrido de hasta 10 obras a través del sistema informático, e imprimir el resultado de forma gratuita. Creo que una propuesta así enriquece la visita si tienes claro lo que quieres ver. La información era suficientemente básica para que la entendiera la gente sin un interés especial por el arte, y al mismo tiempo podía llevarte a una mayor profundidad según ibas avanzando en la lectura. Sin embargo no me gustó el lugar donde estaban las mesas, en la planta sótano del museo y desconectadas de los pasillos que frecuenta la mayoría del público.


Ya en las salas veo que son espaciosas y que pese a la cantidad de gente las obras pueden observarse con comodidad. La iluminación es bastante dirigida aunque en general no me resultó molesta, solo en el caso de algunos cuadros donde había un cristal protector y se potenciaban los reflejos. Lo que más me molestó fue la escasa información sobre las obras expuestas. Los paneles son pequeños y cuesta encontrarlos, están escritos en letra muy pequeña y son incómodos de leer (no me quiero imaginar alguien con mayores problemas de vista). La información es comprensible, pero muy limitada, pareciera que tuvieras que comprarte el catálogo de la tienda y gastarte 12 euros. Las salas están divididas cronológicamente y por situación geográfica, pero su disposición la encontré caótica. Me dio la sensación de que el público se limitaba a ir de una a otra sin mucho sentido.
Después de localizar algunas de las obras que me interesaban en las zonas asignadas a la pintura del siglo XVII (los retratos de Rembrandt, Velázquez),  los siglos XVIII-XX (Goya, Cézanne, Pissarro, Seurat, las obras inseparables de Turner y Claude), y las últimas obras del Renacimiento italiano (Rafael, Tiziano, Tintoretto), me dispuse a conocer la nueva extensión del museo, construida en 1991 y financiada por Lord Sainsbury of Preston Candover y sus hermanos, dueños de una de las principales cadenas de supermercados que recorren toda la ciudad (de ahí su nombre: “The Sainsbury Wing”).


Este ala alberga las obras más antiguas (siglos XIII al XV) y por lo que vi son las que menos interesan al público. Las salas estaban notablemente más vacías, excepto quizás la dedicada a la pintura flamenca que contenía el conocido Retrato Arnolfini de van Eyck. Puede que fuera casualidad.
Aproveché la coyuntura para recorrerlas más tranquila. Esta zona está además decorada de una forma más austera, sin tantos recargamientos, algo que agradecí. Parece ser que se inspiró en las iglesias de Brunelleschi. A los arcos que recorren el espacio se les ha aplicado un efecto de falsa perspectiva, de manera que se van estrechando y dirigen el foco de atención del espectador hacia la obra colocada al otro lado: La incredulidad de Santo Tomás.


Dentro del programa Belle Shenkman Music Programme del “Friday lates” se podía disfrutar durante una hora de un concierto dentro de la propia exposición. Tocó un cuarteto de cuerda del Royal College of Music. Durante ese tiempo la mayoría de los visitantes se dirigieron a su encentro e incluso algunos tuvieron que quedarse a las puertas.
Yo apenas llegué a escucharles, pero no me quedé sin mi sesión de música, ya que más tarde hubo otra junto a la cafetería.
En general salí de allí contenta. Creo que la colección es de mucho interés y cuidan tanto del turista como de la persona especializada. El público que encontré fue muy heterogéneo y pude compartir palabras desde con un historiador del arte hasta con un londinense con otro tipo de formación que acababa de salir del trabajo.
El día en el que asistí introducían además otro tipo de actividades que podían ser interesantes. Me habría gustado participar en algunas más que creo que correspondían con mi perfil (conferencias, dibujo al natural…), pero además de tener que reservar no estaban hechas para todos los bolsillos. Sí estoy segura de que volveré a las visitas guiadas pues por lo que sé ofrecen un recorrido distinto cada semana y son gratuitas. La ampliación del horario me parece también un acierto, que facilita la visita a muchos ciudadanos.
Eso sí, no está permitido hacer fotografías, y fueron varias las personas que vi consultando o discutiendo sobre esto con los de seguridad, que les mandaron directos a la tienda a comprar la postal correspondiente.

Visitando la Tate Modern

Por Clada

Suelo evitar visitar los museos el fin de semana, pero las huelgas de transporte y el horario inglés, que los cierra entre las 17:30 y las 18:00 impiden que lo haga en otro momento. Así pues, fue el sábado por la tarde cuando acabé yendo a la Tate Modern, que ese día no cerraba hasta las diez.
El museo está localizado junto al río, al norte de Southwark, y no lejos de allí hacia Elephant and Castle puedes encontrar parte de la red de galerías de arte contemporáneo e incluirlas en tu itinerario.
Accedo por una de las tres entradas, la que da a la planta donde se encuentran los mostradores de información. El espacio por donde entra y sale la gente es limitado, pero enseguida se abre hacia el interior de lo que en su día fue la sala de turbinas de la central de energía que ahora ocupa la institución. Es un espacio amplio donde se filtra la luz natural, e incluso un día como este no resulta agobiante. Pero veo mucha gente sentada en el suelo, los grupos escolares que están de visita por la ciudad… Y es que no hay ningún mobiliario ni lugar que les permita acomodarse. Tampoco en la planta inferior, donde la mayor parte del espacio se utiliza como rampa de acceso.


Casi todos los museos en Londres son gratis, y este no es una excepción. Puedo visitar todas las exposiciones salvo algunas de las temporales en las que hay que pagar. Eso sí, el precio de estas me resulta excesivo (la actual que hay de Paul Klee sale por 16,50 libras, 14,50 la entrada reducida. ¡Que vienen a ser unos 17 euros!).
En la segunda planta, las salas están dedicadas mayoritariamente al movimiento surrealista y autores relacionados. Aunque son amplias y me parece que están bien conectadas, la cantidad de gente que hay hace imposible detenerse y disfrutar de las obras. En la sala central creo que son excesivas, ya que para permitir que entren han colocado algunas más altas y si bien la iluminación es buena y no muy focalizada no siempre se ven bien. Me llamó la atención el modo en que tratan de conectar algunos autores más modernos con otros del pasado. Su intención es evidenciar cómo las manifestaciones artísticas actuales responden al pasado a la vez que ofrecer una lectura diferente del arte de entonces. Esta exposición en concreto se introduce con una obra de Giorgio de Chirico y Jannis Kounellis. El planteamiento es interesante, aunque no tengo claro si llega a todo el público.


Algo que se repite en todas las plantas, es la intercalación de obra de la colección con exposiciones temporales de autores contemporáneos. En la sala principal de esta han colocado por ejemplo la proyección de la performance de Andrea Fraser. Puede ser un acierto, pero en este caso creo que el lugar reservado a la obra de esta autora pasa desapercibido y además reduce el espacio de la galería que más lo necesita, que recibe más público. Además en este museo no hay una restricción en cuanto a la toma de fotografías, y el volumen con el que hablar e interactuar en las salas, y el ruido se potencia especialmente. Esto impidió que pudiera escuchar bien el vídeo.
Los paneles explicativos son bastante básicos, pero son numerosos y enlazan con el apartado de la página web que amplía la información.  Agradecí que se leen con claridad y se encuentran con facilidad. También cuentan con visitas guiadas gratuitas o las audioguías, que no son demasiado caras, hay contenido descargable en el momento si tienes un teléfono inteligente… Y por lo que pude apreciar, estas guías no se limitan a la transmisión de información y permiten completar la visita con otros recursos electrónicos algo más innovadores.
En las plantas superiores se reducía la afluencia de gente, aunque seguía siendo significativa. Encontré en casi todas la presencia de cafetería y tienda, pero apenas espacios donde descansar sin consumir. No obstante es algo que parece que pretenden ampliar en la extensión que está ahora en construcción.


A lo largo de los pasillos, junto a la cafetería o incluso entre las salas vi también varios intentos de interactuación con el público y de ofrecerle una actividad no meramente contemplativa. En una se le invitaba a responder a algunas cuestiones sobre las exposiciones y dar su opinión, en otra a lanzar una pregunta a algunos artistas, que luego hacen un vídeo respondiéndolas. También podían dibujar en unas pantallas… La gente parecía encantada con ellas.
Hay también un programa de proyección de películas, cursos y talleres, conferencias,  visitas con los comisarios… algunos datos están en las paredes de los pasillos, pero otros solo en internet, pues tampoco hay folletos de papel. Esto se debe a que quieren suplir este gasto con una mejora de los paneles. Aunque algunas actividades tenían precios asequibles la mayoría tendían a ser muy elevados.


Debo decir que pese a los inconvenientes que supone ir en un día de especial ajetreo mereció la pena la visita. No pude ver de la mejor manera lo expuesto en las salas de la colección “Poetry and Dream”, pero encontré autores que me interesaban en otras de las galerías. Es inevitable cuestionarte la presencia de algunos de ellos en un mundo de influencias como es este, y esta institución despierta especialmente mi desconfianza. En este sentido, puede que mi experiencia fuera distinta si revisara cierta información que no se menciona en el museo.
 

Descubriendo el V&A

Por Clada

Nunca había estado antes en un museo como el Victoria & Albert de Londres. Al menos no de estas dimensiones. ¿Qué es lo que se expone en él? Puedes encontrar desde escultura renacentista y neoclásica, pintura de Constable y Turner, dibujos, fotografía… hasta arquitectura, diseño, y artes decorativas de todo el mundo. Es uno de los más grandes centrado en esto.
Llego un lunes a medio día. El hall es diáfano y aunque hay gente no es excesiva. Hay algunos turistas, pero sobre todo se nota la presencia de grupos escolares. Me gustaría saber más sobre la arquitectura de este edificio que parece tan heterogénea, y aunque hay una visita guiada gratuita decido recorrerlo por mi cuenta. Tengo poco tiempo y mucho que descubrir y entender de su colección. Hay varios puestos de información bajo unas lámparas de diseño contemporáneo creadas por escultor Dale Chihuly, que contrastan con la apariencia del resto de la sala. Luego me doy cuenta de que esta mezcla pasado-presente se repite constantemente.


 La visita es gratuita salvo para una de las temporales enfocada al diseño de moda. A la derecha, sin acabar de desligarse del lugar de recepción, está la exposición dedicada al Renacimiento y la Edad Media, y al arte de Extremo Oriente. En estas primeras hay sobre todo estudiantes dibujando en sus blogs.
Nunca he visto antes tantas piezas provenientes de China, Japón, Corea. Como es una novedad para mi, son las que captan primero mi atención. Cada sala la encuentro en sí cuidadosamente diseñada. No hay mucha gente, y pese a estar lleno de vitrinas se recorren cómodamente. Los paneles son claros y creo que se adecuan a alguien sin mucha idea como yo. Pero parecen una introducción insuficiente para entender en contexto los elementos que ves a continuación, que se disponen sin mucha lógica.
En las plantas superiores hay varios espacios orientados al diseño y las artes aplicadas en Gran Bretaña, y otros a presentar diferentes materiales y formatos: joyería, metal, cristal, cerámica… también una sala donde se explican diversos procedimientos técnicos de escultura (elaboración de moldes, modelado…). No me sorprendió que la mayoría de visitantes fueran estudiantes. Londres cuenta con gran cantidad de escuelas de arte, y no solo dedicadas a las bellas artes, también al diseño y otras materias relacionadas. Me parece que este museo es de especial interés para todo este colectivo.


En las salas que contienen pintura y dibujo británicos también predominaba la gente especializada. Esta última hace un recorrido por varios autores desde el 1600 hasta nuestros días. Me resultó un poco forzada como exposición, pues la información que dan parece más una excusa para colocar todas estas obras, y en sí no tiene mucho sentido ni es realmente aportadora. Una vez más las obras se presentan totalmente descontextualizadas.  A mi no me importó, en tanto que no impide hacerte con tus propios hallazgos, pero creo que resulta inútil para otro tipo de público. Aunque enmarcadas con cristal estaban bien iluminadas y no era molesto.  
En cuanto a la estructura del edificio, debo decir que me costó encontrar estas galerías. Y hasta llegar a ellas tuve que recorrer pasillos y pasillos con otras cosas. Apenas hay uno sin nada expuesto o con indicaciones, algo que ponga cierto orden y sirva de orientación. Tuve problemas también para dar con el camino que accede a las últimas plantas. De nuevo te ves perdido entre un montón de piezas. Y es que el museo está lleno de cosas valiosas, pero la colocación es caótica y es difícil entender el contenido, encontrar. El mapa con el que cuentas tampoco es de mucha ayuda.


Decidí acabar mi recorrido visitando la colección de fotografías, que era mi objetivo principal por los autores que sabía que presentaba. Pero desafortunadamente estaba temporalmente cerrada. No obstante me dirigieron a la planta inferior donde había una temporal que no se encontraba señalizada en el mapa. Esta no tenía nada que ver con el resto de permanentes. Era pequeña, aislada, con una narración curatorial mejor construida. Por lo que pude ver este tipo de exposiciones más concretas no suelen ser a las que acude la mayoría del público, lo que es una pena, pues creo que se están perdiendo parte de la esencia del museo y sus posibilidades.
A pesar de las dificultades salí de allí satisfecha. Con una idea algo más clara de la institución, que era a lo que aspiraba. Alberga manifestaciones muy distintas, da espacio a algunas que en otros lugares pueden resultar marginales y minoritarias, tiene una buena colección de obras de distintos momentos históricos a la vez que se actualiza con exposiciones temporales que permiten la presencia de autores contemporáneos… Las galerías están adaptadas, y aunque a veces la iluminación no es adecuada creo que es muy difícil cubrir formatos tan diversos. También hay un esfuerzo por ampliar el contenido y ofrecer al espectador una interacción mayor con la exposición. En casi todas las estancias hay lo que llaman “study rooms” con libros y ordenadores con los que localizar piezas en concreto y profundizar en otros detalles a través de imágenes digitalizadas y textos.
Si bien, como ya he dicho, a veces falla en lo pedagógico y te sientes desatendido ante tanto y tan mal comunicado. Te da la sensación de estar frente a cientos de escaparates que no eres capaz de hilar.


También cuentan con una buena biblioteca, otras actividades formativas, artistas en residencia de variada procedencia profesional, open studios para conocer lo que están haciendo allí que son gratuitos… ¡habrá que volver a conocerlo!